Se nos fué. Menos mal que durante sus últimos años hemos podido disfrutar de su música.
Supongo que ya sabéis que me estoy refiriendo al gran Bebo, el gigante cubano que durante 35 años estuvo oculto en Estocolmo, hasta que lo descubrió Paquito D´Rivera y le produjo el álbum Bebo Rides Again. Unos años despues, en el 2000, se produce otro encuentro fundamental, Bebo participa en la película Calle 54 y conoce a Fernando Trueba, el romance es instantáneo y Trueba se convierte en el productor de los últimos discos de Bebo, hasta el pasado viernes que se rompe esta fructífera relación.
Bebo ha dejado de tocar.
En estos últimos años Trueba produce un total de ocho albumes de Bebo, que recorren todos los palos, Big-bands, Fusión con flamencos, trios, combos, duos (uno con violín, y otro con su hijo Chucho a dos pianos), un nuevo dúo con bajo en vivo, y un magnífico album en solitario. Dejemos al propio Fernando Trueba que nos cuente esta experiencia, en este extracto de la página de ayer domingo en el diario "El Pais"
"Una vez le
convencí de hacer un disco de piano solo. Fueron días maravillosos, los dos
solos por estudios de ensayo y de grabación en Madrid, sin preocuparnos de
nada, solo de la música. Ned Sublette (autor de Cuba and it's music,
para mí el mejor libro que existe sobre la música cubana) se me acercó un día
en Nueva York y me dijo: “Quiero decirte que Bebo es el mejor disco de
música cubana nunca grabado, en cualquier época, en cualquier lugar”.
Creo que en ese disco están contenidas el alma de
Bebo y también el alma de Cuba. Desnudas, sin adornos. Fue lo último que oyó
Cabrera Infante, ya enfermo, antes de morir en el hospital, en Londres. Y
salieron lágrimas de sus ojos. Pensé: ha muerto en Cuba. Se lo conté a
Bebo y le dedicamos el disco. Guillermo murió en Londres. Bebo en Estocolmo."
Nada más que añadir, un poquito de este disco.
Disco recomendado: Bebo (Calle54records, 2005)